Nossas vidas, nossas culturas são compostas de muitas histórias sobrepostas e em disputa. A escritora nigeriana Chimamanda Adichie conta a história de como ela encontrou sua autêntica voz cultural - e adverte-nos que se ouvimos somente uma única história sobre uma outra pessoa ou país, corremos o risco de gerar grandes mal-entendidos, preconceitos e exclusão. O vídeo dura cerca de 19 minutos.
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Um comentário:
Atílio Borón tb chama atenção para uma "outra" história:
El caso de esta víctima es aleccionador del talante moral de quienes pugnan por lograr el “cambio de régimen” en Cuba; también de la catadura moral de medios como El País, y otros similares, que ponen su inmenso poder mediático, formador y deformador de conciencias, al servicio de las más innobles causas. Nada dicen, por ejemplo, de que la desgraciada vida del suicida fue vilmente manipulada por la “disidencia” y sus mandantes, que pretenden hacer pasar por un “preso de conciencia” a quien no fue otra cosa que un delincuente común. También ocultan que la sedicente “disidencia política” es, en realidad, algo bien distinto: un grupo de individuos que fueron filmados mientras recibían importantes sumas de dinero en la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana para financiar sus actividades subversivas de la constitución y las leyes de la república. Es decir, para trabajar conjuntamente con el gobierno de un país que hace medio siglo le ha declarado la guerra a Cuba, que mantiene contra esa isla un bloqueo criminal unánimemente condenado por la comunidad internacional y que ha hecho más de seiscientos intentos de asesinar al líder de la revolución cubana. ¿Cómo reaccionaría Washington si hoy sorprendiera a un grupo de sus ciudadanos recibiendo generosas sumas de dinero, equipos de comunicación y consejos prácticos acerca de cómo derrocar al gobierno de Estados Unidos en la embajada de Afganistán en Washington? ¿Hubiera considerado El País a esos subversivos como “disidentes políticos” o como traidores a su patria? Además, a diferencia de lo ocurrido con los mercenarios cubanos, lo más probable es que los estadounidenses hubieran sido inmediatamente ejecutados, acusados del delito de traición a la patria por su desembozada y antipatriótica colaboración con una potencia agresora.
No Pagina12 porteño
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